domingo, 6 de noviembre de 2022

Más bonito que un San Luis.

Ahora recibimos muchos whatsapps llenos de chascarrillos, chistes viejos adaptados, recortes de prensa, creaciones de seudo profesionales bromistas, una variedad de historietas que te repiten dependiendo del grupo al que estás afiliado, con tendencias políticas más o menos claras, influye mucho el carácter. A mi me gustaría saber que opinaría don Luis de las redes sociales, algo imposible, sólo puedo imaginármelo. Dime Luis,  ¿tú que harías? le decía a del Olmo. Don Luis Sánchez-Polack, uno de los pocos ...casí me atrevería a decir genios que he conocido, utilizar esta palabra es como la palabra mito o leyenda usada con tanta frivolidad para calificar a gente mediocre. Don Luis, además, no se daba ninguna importancia como cualquier persona realmente inteligente. Sólo me atrevería a compararlo con Groucho aunque debo confesar que don Luis me llegaba más al corazón. Una de las muchas características de don Luis que mostraban su aguda inteligencia, sus recursos infinitos, su capacidad de improvisar era que no le importaba parecer antiguo o viejo o carca o pasado; no creo que nadie se lo llamase, nunca, aunque podría haber estado en un mesón con Cervantes o Lope, tomando una cerveza, que era lo suyo en Casa Sixto, con Quevedo o Gómez de la Serna y hablando del gobierno. Hoy no me sé el nombre de la mayoría de ministros/as y lo que es peor no me inspiran una línea, una coña. Don Luis no me lo perdonaría. Amén.

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