martes, 19 de junio de 2018

Génova tiembla Moncloa delira. nos queda el basket. Good luck Luka Doncic!

Mes de junio, año de Mundial, Rusia con sus turistas y El Partido Popular en busca de su líder. No puedo opinar, ni intuitivamente, ya que no los conozco, o muy poco, ninguno, femenino o masculino, me parece que tengan nivel, claro que tampoco el del PSOE, o Podemos o Ciudadanos y uno es presidente del gobierno y los otros aspiran, se lo creen o sueñan. Simplemente dan una imagen, normalmente creada por sus rivales. Lo de la imagen es lo que vende en una copia mala, hispana, del hacer de Hollywood. No me gusta ninguno de los candidatos que se someterán a sus bases, porque no dan la talla o el nivel es bajo, es como tener que aceptar en el Madrid a jugadores que sabes no son digno del club, cuestan mucho y son ensalzados por los medios. Nos ha pasado en otros momentos y sólo pedías honestidad y que sudasen la camiseta.
Experiencia de ministros exhiben algunos, ambición supongo que todos, viejos y jóvenes,  y curriculums regulares o dudosos, ya que aunque sean ex ministros  ¿qué han hecho, aportado, en su cargo?. Existe la esperanza que alguien que es abogado del Estado, pues tenga algo que no se ha mostrado hasta el momento, de cuando era joven y soñaba.
Como parlamentarios flojitos, poco carácter, personalidades sin consolidar, inseguridades, sensación de incapacidad para resolver los verdaderos problemas y eso si unos más queridos de los medios que otros. En resumen mucha superficialidad, poca autenticidad  ¿y luego...?
Me quedo con el baloncesto, esa serie final del Madrid contra el Baskonia y ese triunfo en cancha ajena, otra liga, otra Europa League, un equipo de verdad. Sobre todo ver a tipos como Lull, después de la grave lesión, a Rudy dar un recital recuperándose a su edad, a Felipe, ahí siempre, a todos los demás desde Carroll a Ayón, Campazzo, Thompkins, Causeur, Tavares, Randolph, siempre uno o dos diferentes al partido anterior para exhibirse ante sus brillantes rivales, muy competitivos, en su propio terreno, ante su público. Y Laso, bravo una vez más, gran ejemplo de cómo conducir jugadores y con circunstancias muy adversas. Me dejo el final para Doncic, brillante jugador, que necesita probarse entre los mejores, le deseo que triunfe en la NBA, suerte y a por Lebron.

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