¿ Envidia, desprecio? ¿ Cuál es el pecado de las Españas?
Me temo que no uno sólo, como cualquier pueblo con historia, tenemos algunos defectos y algunas virtudes. también tenemos a Rafa Nadal. que se pone a quitar barro y en The Times sale en portada ( no creo que con buenas intenciones porque no me fio de los ingleses cuando alaban algo nuestro) y las redes, (esas que tantas sandeces dicen) muestran el grado de estupidez y vacío del ser humano. Menos mal que don Rafa sigue a su bola, que casi siempre esta bien y con sentido, gane o pierda al tenis que es lo suyo.
Canonizan en Roma al papa Pablo VI, de mi niñez y adolescencia. Se supone que he vivido, o transitado en los tiempos de un santo oficial, como Juan XXIII o Juan Pablo II, y realmente no sabría qué decir. No se yo si para los papas es más complicado ser santos.
Mientras gozo de la bahía de Santander de su cocina, pescado, verduras o carnes, de sus gentes. Me ayudan a salir en una foto en La Magdalena y me cuentan cosas de Seve Ballesteros, la gente de Pedreña, la pesca de la almeja d e180 euros kilo y la mili en Ferrol, versión de un Cántabro aguerrido.
No se porqué pensé en los ocho siglos de Reconquista, los seis millones de españoles de entonces, el emperador Carlos, y la titánica labor desarrollado en Europa, las Américas y el resto del mundo. Supongo que mis antepasados se pusieron en forma en el constante batallar contra los sarracenos, moros o musulmanes y luego, hasta desangrarnos, llegamos a cualquier confín de la Tierra. Alto precio pagaron y pagamos, nos hemos quedado sin fuerzas.
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