Ya lo decía Mr. Darling al final, él había visto el barco volar, hacía mucho, mucho tiempo.
Nos olvidamos de cuando éramos niños rápidamente, no sé exactamente cómo ni cuándo, pero pienso que todo sucede cuando nos creemos muy listos, todo lo sabemos.
La política, los negocios, Las Vegas , están llenos de proyectos de Mr. Darling que no vuelven a ver el barco de Pan volar, después de todo los buques de guerra no vuelan, ni los trasatlánticos tampoco. Para volar hacen falta motores, potencia, formas aerodinámicas y alas, no basta con los polvos de Campanilla. Es imposible evitar perder la inocencia, dejar de hacerse mayor o madurar, ser adulto, sin embargo es bueno controlarse un poco y pensar que el mundo de los mayores no es lo que parece. El capitán Garfio es villano, un poco canalla, pero un señor, comparado con los ejemplares de ese ambiente de adultos.
Los hay, además, señores, y dicen cosas.
Hoy me ha llamado la atención que Alain Delon, el bello, dijese que a él le han acosado varias mujeres en su vida, supongo que de hombres no quiere hablar o es que no les atraía. A las mujeres si las atraía y mucho. Entonces alguna le tiro los tejos y no se sabe qué pasó, el Metoo no ha respondido todavía, han abusado.
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