lunes, 15 de enero de 2024

Cada uno es como es y nada más.

Lo de "No vayas" puede que signifique vente conmigo también. Nunca me lo habían dicho, a mi que soy como Clint Eastwood, frío, calculador, Unforgiven, y con una mirada u ojos que dan miedo, esa frase de dos palabras. Mi acompañante..., nunca pensé que hablaría de esta persona, de dos añitos, especial para mi, sin poder ser imparcial. Nació en New Orleans, Louisiana, ciudad que visité muchas veces en el pasado. Llegué para verla con la decisión de sentir como me recibiría, yo pensaba en algo especial. Así fué, sin pretender sustituir a sus padres, acerqué un dedo a su cuerpecito en la cuna y lo agarró muy fuerte. No habla mucho, me llama por el apodo que utiliza mi mujer, tiene dos idiomas encima y otro que viene, elige las palabras en la lengua que le parece más sencillo. Hasta ahora es de una gran agilidad, vitalidad, salud, sabe que tiene a muchos detrás de ella y se aprovecha. Se ríe de forma abierta, sonora, sus ojos son azules, pelo rizado, es miedosa y con mucha curiosidad, muy femenina o lo que se entendía, en colores, objetos, a la vez sólida. Hemos leído muchos cuentos, sobre todo Peter Pan, Los Tres cerditos, Alicia, Cenicienta y más Pan con Hook (le da miedo) y Tiger Lilly que es ella.  Construimos un buque de vela en mi cama muchas veces. Desde muy temprano ha ido en mis hombros, lo malo es que ahora quiere ir sin que la sujete con un sentido innato del equilibrio que me preocupa. Tiene muchas cosquillas. Ya ha aprendido a actuar, hacerse la herida como Wendy en el cuento de verdad. Alguno me comprenderá. Han sido dos años de mucho contacto, paseos, contarle todo, preguntarle si me entendía y siempre la misma respuesta: si. Para colmo al pasar por Chamartín dice : tú campo. Ha sido un placer, dadas las circunstancias, conocer a este ser que probablemente no recordará nada de lo nuestro, ni de nuestras experiencias y puede que sea lo justo.¿O tal vez si lo recordará?

1 comentario:

  1. Abuelo, como se decía en otras épocas, se te cae la baba.
    Disfruta mucho de los nietos. Son un regalo que Dios nos hace en la tercera edad.

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