jueves, 18 de enero de 2024

Por toda la eternidad.

Esta foto antigua 1880 en un periódico me ha llevado al Mena House, el Valle de los Reyes, el Nilo y Sinuhé. La novela Sinuhé el Egipcio es de Mika Valtari, el protagonista de la ficción es un brillante médico, Akhenaten es el faraón, el autor se informó sobre el antiguo Egipto de hace miles de años donde hubo una historia de un tal Sinuhé en la XII dinastía. Debo confesar que Egipto me atrajo siempre, casi tanto como Nefer Nefer Nefer al joven doctor. Cuando lo he visitado de norte a sur me  ha cautivado, me parece fascinante pero cuando lei el libro me hubiese gustados ser Sinuhé y conocer a Nefer. Yo me imaginé a una Nefer ideal. Baketamon, la cual vuelve loco a Sinuhé en la película que vi después de leer la novela es distinta. La dirigió el mismísimo Michael Curtiz con un reparto de aquel Hollywood y la mismísima Gene Tierney, otros y otras. Toda la vida de Sinuhé es apasionante y como vende las tumbas de sus padres que era más que vender tu alma, para un egipcio, si esto es posible. Sinuhé cuenta su vida, viajes, aventuras, gloria, caida y todos los errores que el hombre comete. Quizá la condición humana es siempre la misma. En medio de la trama hay un avanzado mundo tecnológico, científico, medicina, el tratamiento a los muertos, que los egipcios llevaron a un gran nivel. No se lo que hubiese elegido llevar en mi tumba, seguramente el Titanic. Primero tendría que tener dinero para comprarla. He pensado en volver a leer la novela pero ya no soy el mismo, yo me cría con la capacidad como Sinuhé de llegar, caer y levantarme.

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