viernes, 24 de octubre de 2025

No soy un clásico.

 

En mi opinión 1992 fue nefasto. Recuerdo veranear en California, los gringos diciéndome que había Olimpiada en España. No aguantaba a Jorge Pujol, ni ese despliegue del innombrable Samaranch, ni regar de dinero una ciudad, ni la sonrisa interesada, ni esas absurdas pretensiones, ni ese catetismo, ni la falsedad. La figura del entonces príncipe en la ceremonia resultaba muy televisiva, una hermana llorando, el balonmano, la vela, la Vanguardia, todo me sonaba a puñalada por la espalda. Para colmo el holandés Cruyff, enorme jugador, parecía la panacea de todo, ganaban en Wembley, todos veíamos las eliminatorias, la final. Nosotros, con un equipo como era, caíamos en lo de Tenerife, como caíamos, contra la "maravilla" local liderada por Valdano que ya sabemos lo que da y no da. Eso si me inclinaba ante Redondo. Me acomplejé porque una cosa es perder y otra comulgar con ruedas de molino. Dos cosas fueron mi puntilla, lo de llamar a un partido El Clásico, escuchar a los de Canal Plus con sus inventos y sobre todo , ante todo, oir que a un equipo le llaman Dream Team comparando con ese equipo de basket donde estaban un grupo de jugadores, alguno ya acabado, realmente únicos, a los que había disfrutado allí en USA. Eso no podía aceptarlo. Ahora estoy perdido otra vez entre expertos.

He visto al FCB un partido contra el PSG, les dieron un buen repaso. He visto todos los del mío. Los cambios que creía de Xabi no se han producido casi. A final si hay un 4-3-2-1, o lo que sea, parece la alineación del anterior ...sin aquellos del medio campo ya retirados sin Karim, sin defensas como el año pasado. Me parece que se juega casi igual no tan mal como el curso anterior. Veo unos huecos enormes en determinados momentos. No somos equipo, ni continuos. Entonces otro, de donde sea, con todas sus ganas, nos puede ganar, porque no somos lo que deberíamos y ¿esto hace que los otros tengan a Jordan, Magic, Larry & company? 

Si Dios quiere estaré en Chamartín, con demasiadas mocitas de camisetas y móvil. Espero que seamos noble & bélico, que vayamos a lo nuestro, todos juntos, sin comparaciones ni estupideces, eso lo dejamos para el visitante que al fin y al cabo son los que tienen un problema ancestral y todo lo justifican con nosotros. Lo nuestro es fútbol, todo nervio y corazón, veteranos y noveles, nada más. Hasta el final. 

Get back, Beatles la oí mucho  en ese verano en una playa con bar de máquina de discos "Get back to where you once belonged," junto a Delilah. A mi me gustaría que mi Madrid funcionase. Ahora mismo estoy despistado. Intento aprender de los expertos y no me aclaro. No quiero gafar a Xabi que sabe, me gusta y preocupa, intentando razonar y explicar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario