sábado, 13 de julio de 2013

Un rabino en Hollywood

¿Por qué me gusta Mel Brooks?
En esto del cine hay muchos premios. No creo mucho en los premios, halagos y recompensas, y me caen a veces mejor los que no están.  La lista de los no-premiados. Uno de los galardones es el Oscar, quizás el más apreciado. A mi me gusta el de la American Film Association, el que dan por una vida, por la contribución a la cultura cinematográfica, incluída la TV. Como todos los premios es discutible, subjetivo. Los premios crean a veces mala conciencia, injustos, con mucho politiqueo y pasteleo; en este caso más. La verdad es que como todos los premios los conceden los humanos
Y ausencias, grandes ausencias (Charlie Chaplin...y muchos otros). Empezó en 1973, o sea que es jovencito. Ya había muchos grandes vivos en 1973 y muchos difuntos.
Al primero en concedérselo, no hubo muchas dudas ( y mira que había candidatos) Mr. John Ford. El de 2013 a Mr. Mel Brooks
Gran ceremonia con sus shows, sus canciones, amigos, colegas, admiradores, Hollywood a tope.
Hace casi cuatro años en el Kennedy Center los Obama y Bruce Springsteen participaron en un homenaje a Mr. Brooks. Muchos grandes actores repitieron los números de sus películas. El presidente no parecía entender mucho la gracia de las bromas. Mr. Brooks a su edad disfrutaba como un colegial, repitiendo las letras, al compás de los cantantes, quería saltar, bailar, cantar y no dejar de hacerlo. Su sueño, de verdad, fué ser Frank Sinatra, se dió cuenta que era imposible. Se acepta como cómico y esta muy lejos de ser un buen director. Es un hombre inteligente. Creo que tiene razón. Lo suyo es la broma, del barrio judío, de los judíos en América o allá donde están; de sus recuerdos, infancia y familia, lo que oía y veía. Probablemente el resto le aburre, pero como buen judío tiene que vivir, aunque haga bromas sobre judíos. Claro que probablemente no admitiría una broma que no sea suya, sobre judíos.
Afortunadamente se cruzó Gene Wilder en su vida, que le daba este toque de escritura que marca la diferencia, y puso orden en el caos de Mr. Brooks y así llegaron "The Producers", "The Young Frankenstein", "Blazing Saddles". En esta última con la condición de que no actuase Mr. Brooks. 
Luego se atrevió, con su fantástica mujer, a hacer un remake de "To bo or not to be", no siendo ni Ernst Lubitsch ni Jack Benny; ni pidiendo ayuda a Mr. Wilder porque el guión es el original, ¿quién osaría cambiarlo?
Es un cómico y a mí me hace reir, cosa harto complicada. Descubrí en US que la serie de TV llamada en España "El superagente 86", "Get smart," al final ponía en los títulos created by Mel Brooks, claro no podía ser otro.
En la película " Twelve chairs" alguien dice: Desea lo mejor, espera lo peor", muy suyo.
Gracias Mr.Brooks.

No hay comentarios:

Publicar un comentario