Cuentos.

 Hay que tener cuidado con los cuentos que lees porque te pueden llamar la atención. No se los cuentos que leen Sánchez o los grandes líderes que nos cobijan del futuro, ni siquiera sé si Sánchez lee cuentos pienso que para esta persona tan ocupada los cuentos cuentos son. Me ha ocurrido leyendo cuentos en estas fechas del puente que no practico. Me temo que Disney ,Walt para los íntimos y sus trabajadores, no hubiese sobrevivido al siglo XXI. La dama y el vagabundo es machista, Blancanieves no tiene por donde agarrar a los 7 enanitos y ella friega que te friega mientras esos señores bajitos tienen una mina de diamantes que ni cierran con llave, el beso es un poco Rubiales. Lo de Cenicienta no tiene nombre y en lugar de aspirar al Ecofin se deja llevar por un baile. Los Aristogatos es machista tanto el protagonista como sus amiguetes del jazz, incluso los gatitos pequeñitos y la preciosa gata pues parece una influencer que vive como una reina y al final se va con O'Malley que es un golfo. El lobo feroz no sólo es feroz sino que tiene un apetito desmedido como Sánchez. Lo peor ha sido Peter Pan, no James Hook que es malo como Edgar el mayordomo ambicioso de los gatos de opereta. Peter mi ídolo, piloto natural, marino sin límites, enemigo de piratas e indios, amante de princesas, amigo de sus amigos, le dice a Wendy :"Las mujeres hablais mucho". Eso le costaría salir del gobierno de Sánchez, dejar a la UE a la deriva y ser condenado en California. Menos mal que es huérfano e inglés. En esto es como Charles de Windsor que The Crown quiere purificar. Ya hablaremos o como escribía Billy Wilder eso es otra historia.